¿Quién manda?

"Anónimos, sin rostro conocido, sin poder, estatus o fama. Nadie piensa en nosotros (casi nadie), solo cuando os interesa llegar a lo más alto. Entonces, volvéis los ojos hacia los que os seguimos. Vosotros, líderes, recordad siempre que sin nosotros no sois nada. Casi todos estamos destinados a ejercer el papel de seguidores en el drama de la vida; pero ¿por qué quedarnos con ese oscuro papel? ¿es que acaso ganamos algo con ello? La verdad y aunque pueda parecerte una locura, dados a elegir, prefiero gozar de mi tiempo y de mi energía para lo que quiera, en lugar de dejarme la piel intentando llegar donde estáis. Es menos poder, menos estatus, pero también menos riesgo y esfuerzo. Así que, prefiero sentirme uno más con los colegas de oficina, jugar al fútbol con ellos, irme de tapas, sentir que soy parte de la comunidad y saber que esta me acepta, me quiere, me necesita, en vez de mirarla desde arriba, a distancia. No te lo creerás, pero en realidad soy yo quién te observa cómo trabajas, tus éxitos y tus fracasos. Te crees que me mandas, pero únicamente me preparo lentamente para tomar tu lugar. Así que no te engañes, no es que no valga, es que no me interesa estar en el punto de mira de todos los que primero me incubran, para luego odiarme y envidiarme. Para eso mejor me quedo como estaba. Y tú, por favor, haz lo mismo, no te pases, no abuses del poder que te hemos dado".

Redes (La 2) | nº 15: Aquí quien manda